La educación en sexualidad es esencial para el desarrollo humano y el crecimiento personal. Hoy en día, cada vez más personas están interesadas en saber más sobre este tema, para comprender mejor qué es y cómo hacer un uso saludable de él.
Para ayudar a las personas interesadas en este tema, aquí tienes una guía completa para formarse en sexualidad: qué es, la importancia de educar en ella, las directrices técnicas internacionales, formas de educar en ella y algunas ideas clave a tener en cuenta.
¿Qué es la educación sexual?
La educación sexual es el proceso de adquisición de información relacionada con el sexo, la intimidad y las relaciones. Incluye temas como la imagen corporal, la orientación sexual y la identidad de género, la anticoncepción, las infecciones de transmisión sexual (ITS) y la prevención del embarazo, el placer sexual y las habilidades de comunicación. Este tipo de educación pretende ayudar a las personas a ser más conscientes y a tomar decisiones informadas sobre sus relaciones sexuales e íntimas.
La importancia de la educación sexual
La educación sexual es una parte importante del crecimiento y desarrollo personal de cualquier individuo. Puede ayudar a los jóvenes a tomar decisiones informadas sobre su salud sexual y su bienestar. Al tener acceso a una educación sexual integral y de calidad, los jóvenes pueden aprender lo necesario para proteger su salud física, mental y emocional, y también aprender sobre comunicación sana, habilidades para relacionarse y sexualidad sana.
Además, el acceso a una educación sexual integral puede ayudar a reducir y prevenir la violencia sexual, las ITS, el embarazo adolescente y otros problemas sanitarios relacionados con la salud sexual.
Directrices técnicas internacionales sobre educación sexual
Las directrices técnicas internacionales sobre educación sexual, citadas a lo largo de la guía práctica, ofrecen una amplia variedad de orientaciones a los líderes nacionales y regionales sobre el establecimiento de mecanismos para implantar con éxito programas de educación sexual y mantenerlos. UNESCO. 2018.
Modo de educar en sexualidad
La educación en sexualidad puede empezar a cualquier edad, aunque lo mejor es dejar que el niño marque el ritmo con sus preguntas. La exploración temprana es importante, ya que los niños empiezan a aprender sobre su cuerpo cuando aprenden a andar y a hablar.
Las lecciones didácticas guiadas sobre educación sexual pueden dividirse en cuatro bloques principales: sexualidad y educación sexual, buenas prácticas en educación sexual, formas de educar en sexualidad y un catálogo de módulos temáticos.
Profesores y educadores pueden utilizar como recurso la guía completa de “Crecer en Convivencia Pacífica y Armónica”, que incluye estrategias de educación sexual integral para el profesorado, prevención de la violencia y fomento de las relaciones respetuosas.
Ideas clave a tener en cuenta al educar en sexualidad
Hoy en día, muchas cosas que antes se daban por sentadas están siendo cuestionadas. Desde la frase “Buenos días chicos y chicas”, que ya no incluye a todos los alumnos, hasta las relaciones entre iguales, que tienen una perspectiva de género. En este nuevo escenario, la sexualidad entra en la escuela con los chicos y las chicas.
La prevención y la educación son claves cuando se trata de la sexualidad adolescente. Los educadores y psicólogos deben proporcionar a los adolescentes conocimientos, habilidades y valores que les ayuden a vivir su sexualidad de forma plena y responsable.
Por último, una forma de educar en sexualidad es enseñar a los niños y adolescentes un concepto de sexualidad que incluya tres funciones principales: reproducción, placer y comunicación.
Conclusión
Educar en sexualidad es una parte esencial del crecimiento y desarrollo humanos. Con esta completa guía, las personas pueden aprender qué es, la importancia de la educación sexual integral, las directrices técnicas internacionales al respecto y las ideas clave a tener en cuenta al participar en el proceso educativo.